miércoles, 15 de octubre de 2008

Spaghetti bridge



Joder, es increíble, hay todo un mundo sobre los puentes hechos con espaguetis. Sí, con los espaguetis italianos, con los de pasta de comer de toda la vida, vamos.

La educación anglosajona parece ser que es más práctica y a la vez más competitiva que la que conocemos y que a los tíos les da por hacer concursos de lo que sea. Con eso resulta que los alumnos se esfuerzan, se documentan, se motivan, toman decisiones, trabajan en equipo y todo eso que parece imposible que haga un adolescente. Y, mira por dónde, un concurso de lo más extendido es el de hacer modelos de puentes con materiales asequibles y más concretamente con espaguetis (de pasta seca, sin cocer). Imagínate: miles de chavales en la edad del pavo pensando esquemas resistentes, comprando pasta en el supermercado, construyendo puentes en el salón de casa y sometiéndolos después a una prueba de carga el día de la competición...

Total que descubro que no sólo la ingeniería estructural hecha con las manos puede ser divertida si no que hay infinidad de pruebas documentales que lo demuestran: videos, imágenes, reportajes... Un universo por descubrir. Alucinante.

martes, 14 de octubre de 2008

De qué va esto



Aquí tenemos dos estructuras en medio de la nada. Falta el terraplén que defina la plataforma de lo que se anuncia una doble clazada de autovía y falta también la carretera o lo que sea que pasará por debajo. Por ahora es una obra en construcción, sin referencia y sin sentido.

Pero a mí esta imagen me resulta supersugerente. Es en sí misma una testificación de la presencia de la obra civil en el territorio. ¿Para qué coño sirven estos dos mamotretos? En esa primera pregunta que inevitablemente se nos viene a la cabeza radica el interés de la foto. De momento advierten que está teniendo lugar una transformación del paisaje. Anuncian futuras vías de conexión. Denotan la presencia de lo construido en lo natural. Son también piezas escultóricas a gran escala. Me recurdan las colosales esculturas de Heizer en su ComplexCity en el desierto de Nevada. Y eso sin mencionar la carga poética que tiene toda obra en construcción, en proceso; algo que está siendo pero que todavía no es. Poesía solo perceptible para un observador capaz de abandonar el lastre de objetividad de una formación racional en favor de las posibilidades de lo subjetivo.

¿Más ideas?